Cualidades del buen propósito
1ᵒ. El buen propósito debe ser firme. Fijémonos en estas comparaciones:
1) Vosotros pisáis u oprimís con el pie un guijarro, cambia de sitio, lo que denota que no está firme;
2) os herís contra un poste y vosotros caéis; el poste está firme… ,
3) una pequeña planta, la puede fácilmente arrancar un niño … , no está firme; un árbol, al contrario, con sus profundas raíces, a pesar de todos los esfuerzos que se hacen para arrancarselo, no se mueve, éste árbol está firme … Así el deseo y la voluntad nuestra … El propósito que no es firme es un simple deseo; el propósito firme es una voluntad decidida, intrépida.
Hay muchas diferencias entre el yo quiero … y yo querría … El «yo quiero» es propio de hombres decididos, que ponen los medios necesarios para e logro que se proponen, y el «yo querría» indica una voluntad débil, dispuesta a hacer tal o cual cosa, con tal que no cueste mucho …
¿Puedo yo saber si ya no pecaré más? Esto no es lo que se pregunta, sino si vosotros tenéis la voluntad sincera de no pecar más …