Cuando la maldad se disfraza de obediencia

Nuevo orden mundial

Práctica esencial del Nuevo Orden Mundial es entrenar a las masas democráticas para aceptar falsos dogmas, y para hacerlos pasar como tales, contratan a científicos y profesionales para que transmitan el pseudo-conocimiento que se quiere implantar. Y es a través de la ONU, herramienta política por excelencia de la masonería mundial, que se busca implantar este gobierno mundial tecnocrático con una sola legislación proveniente mayormente de los pactos o tratados internacionales.

Una de las técnicas que esta gobernanza utiliza para que la gente acepte estas imposiciones es hacernos sentir cómodos, esto a través del consumismo y las conductas rutinarias. De esa forma, se nos acostumbró al confort proveniente de las “bondades” de la tecnología actual, que al hacer “más fácil y menos esforzada” nuestra vida, nos lleva a la inacción ante las terribles injusticias y crímenes que hoy se viven, para no perder la “porción de felicidad que nos toca”. De ahí que una de las premisas fundamentales del hombre moderno es “no ser comedido” es decir, mejor no entrometerse aún cuando se trate de defender los Derechos de Dios.

De la misma manera en el plano religioso, el modernismo promueve el sentimentalismo. Así con la misma premisa tecnocrática “confié, somos especialistas”, se promueven falsos dogmas que llevan al catolicismo ignorante de su fe a aceptar premisas tales como: “al Papa lo elige el Espíritu Santo y por lo tanto no puede equivocarse” o“prefiero equivocarme con el Papa a estar en la Verdad en su contra”, por lo que se convierte en el más terrible pecado para esta gente, el corregir o hacer observaciones a quienes incurren en transgresiones a las enseñanzas inmutables de la Iglesia, cuando estas provengan de sus autoridades. También se suple la falta de conocimiento de los saberes que estamos obligados a conocer para salvarnos, con obediencia ciega y de ese modo, la masa cristiana apela a la comodidad de omitir cualquier formación para simplemente dejarse dirigir por las autoridades eclesiásticas en quienes sienten, más que el deber, la comodidad de obedecer sin reparos.

Bergoglio el destructor  NCSJB

Así en el video que presentamos hace unos días (aquí), el Padre Santiago Martín denuncia la posibilidad cierta de un cisma, señalando que está en juego, posiblemente como nunca en 2000 años, el futuro de la Iglesia a causa principalmente del uso demagógico del concepto de misericordia. 

Sigue leyendo