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OCTAVO DOMINGO DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

( Doble – Ornamentos verdes )

Rinde cuentas de tu administración

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Séptimo Domingo Después de Pentecostés

(Doble – Ornamentos verdes)

Cuidaos de los falsos profetas que vienen a vosotros vestidos con piel de oveja, más por dentro son lobos rapaces. (San Mateo 7.15-21).

El Espíritu Santo sigue siempre pausadamente, calladamente transformando, divinizando la faz sobrenatural de la tierra. Es sal de la Sabiduría, que sazona al mundo, que purifica las almas, que las madura con sus divinales fuegos para la vida eterna.
   Ese divino Espíritu tiene razón de Don, y entre los Dones el más augusto y preciado es el de Sabiduría, tan solicitado por la Iglesia ya desde estos domingos, y sobre todo en los de agosto, recordarnos en maitines las figuras de David y de Salomón. Ambos fueron grandes amantes de la divina Sabiduría, que nos hace sacar gusto a Dios, y enjuiciarlo todo según su certero y sapientísimo criterio: Esta es aquella Sunamitis tan ferviente que calentaba al anciano David, tan casta que no le incitaba la libídine. Esta pidió también el joven Salomón como esposa al tomar las riendas del gobierno; ésta finalmente constituirá para los elegidos las delicias del cielo. «Videnti Creatorem angusta est omnis creatura», al que ve al Creador, dice S. Gregorio, parécele poquita cosa cualquier criatura, charquitos de agua turbia, frente a las aguas vivas de una fuente caudalosa.
   Los pingües frutos de esta celestial Sabiduría hállanse enumerados en la Epístola de hoy; y, en cambio, el fruto y paga del pecado es la muerte, además de la vergüenza y del torcedor de la conciencia que le acompaña y que le sigue.
   Por nuestra vida y por los frutos que rindamos se conocerá qué tal árbol somos (Ev.), pues no está todo en tener buenas abras, sino en la Sabiduría y cordura, que el Espíritu Santo comunica a los que de Él se dejan dócilmente guiar, traduciéndose luego en obras buenas y de edificación. «Preciso es, dice S. Agustín, que manos y lengua vayan a la par; y que mientras ésta glorifica a Dios, aquéllas obren». «Las palabras placenteras y los aires de mansedumbre deben ser evaluados por el fruto de las obras», dice S. Hilario; porque a menudo sucede que la piel de oveja sirve para ocultar la ferocidad del lobo (Noct. 3º).
   Tenemos, pues, en el pacífico Salomón una figura de Cristo, el cual dijo cierto día: Éste que veis es más que Salomón. A Él debemos escuchar (Grad.) porque tiene palabras de vida eterna. Él es la sabiduría misma del Padre.
   Pidamos al Señor, mantenga nuestra vida en los caminos de su justicia, aparte de nosotros todo lo nocivo, y nos conceda todo lo saludable (Or.).
   El párroco celebra hoy la misa por sus feligreses.  

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SEXTO DOMINGO DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

( Doble – Ornamentos verdes )

Y los dio a sus discípulos para que los distribuyesen entre las gentes

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QUINTO DOMINGO

DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

Ve a reconciliarte con tu hermano.

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CUARTO DOMINGO DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

(Doble – Ornamentos verdes)

De hoy en adelante serás pescador de hombres.

El amor de Dios sigue en este domingo revelándonos sus delicadezas. El mundo se nos presenta con la imagen de un mar lleno de tormenta y peligros. Estamos salvos -pensamiento de la Pascua- pero el enemigo, envidioso de nuestra felicidad, se esfuerza por perdernos de nuevo. No debemos desalentarnos. En medio de todas las luchas, la Providencia de Dios vigila sobre nosotros. Este es el pensamiento dominante de la liturgia de hoy.

IntroitoPs 26.

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29 de junio. San Pedro y San Pablo, apóstoles.

29 de Junio

SAN PEDRO Y SAN PABLO, APÓSTOLES

I clase, rojo

Día del Papa. Colecta del óbolo de San Pedro

Solemnidad de san Pedro y san Pablo, apóstoles. Simón, hijo de Jonás y hermano de Andrés, fue el primero entre los discípulos que confesó a Cristo como Hijo de Dios vivo, y por ello fue llamado Pedro. Pablo, apóstol de los gentiles, predicó a Cristo crucificado a judíos y griegos. Los dos, con la fuerza de la fe y el amor a Jesucristo, anunciaron el Evangelio en la ciudad de Roma, donde, en tiempo del emperador Nerón, ambos sufrieron el martirio: Pedro, como narra la tradición, crucificado cabeza abajo y sepultado en el Vaticano, cerca de la vía Triunfal, y Pablo, degollado y enterrado en la vía Ostiense. En este día, su triunfo es celebrado por todo el mundo con honor y veneración.

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DOMINGO DE RESURRECCIÓN

Resucitó como lo dijo

(Estación en Sta. María la Mayor)
(Doble de 1ª clase con Octava privilegiada )
Ornamentos blancos

IntroitoPs. 138

INTROITUS S. 138, 18 y 5-6 – Resurrexi et adhuc tecum sum, alleluia: posuisti super me manum tuam, alleluia: mirabilis facta est scientia tua, alleluia, alleluia. Ps. Ibid. 1-2. Domine, probasti me, et cognovisti me: tu cognovisti sessionem meam, et resurrectionem meam. V. Gloria PatriIntroito – Sal.138 Resucité, y aun estoy contigo, Padre mío Aleluya: pusiste sobre mí tu mano, aleluya : admirable es tu sabiduría, aleluya, aleluya. Señor, me probaste, y me conociste; Tú conociste bien mi humillación y mi resurrección. Gloria al Padre, etc.

Oración-Colecta

ORATIO – Deus, qui hodierna die per Unigenitum tuum, aeternitatis nobis aditum devicta morte reserasti: vota nostra, quae praeveniendo aspiras, etiam adjuvando prosequere. Per eumdem Dominum nostrum. R. AmenOh Dios, que en este día, por tu Hijo Unigénito, nos franqueaste de nuevo las puertas de la Eternidad; ayúdanos a realizar los santos deseos que Tú mismo nos inspiras, previniéndonos con tu gracia. Por el mismo, etc. R. Amen.

Epístola

EPISTOLALectio Epistolae beati Pauli apostoli ad Corinthios (1, 5, 7-8) – Fratres: Expurgate vetus fermentum ut sitis nova conspersio, sicut estis azyni. Etenim Pascha nostrum immolatus est Christus. Itaue epulemur: non in fermento veteri, neque in fermento malitiae, et nequitiae: sed in azymis sinceratis, et veritatis.Lección de la Epístola del Apóstol S. Pablo a los Corintios(1, 5, 7-8) – Hermanos: Purificaos de la antigua levadura, para convertiros en nueva masa, omo ázimos que sois. Pues ha sido inmolado Jesucristo, nuestro Cordero Pascual. Por lo tanto, regalémonos, no con vieja leva dura de malicia y de perversidad, sino con ázimos de sinceridad verdad.

Salmodia

GRADUALE Ps. 117, 24 et 1. – Haec dies, quam fecit Dominus: exsultemus, et laetemur in ea. V. Confitemini Domino, quoniam in saeculum misericordia ejus.Allelúja, allelúja. V. (Cor. 5, 7) Pascha nostrum immolatus est Christus.Gradual – Este es el día que hizo el Señor: regocijémonos, y alegrémonos en el Señor: regocijémonos, y alegrémonos en El. Alabad al Señor , porque es bueno: porque su misericordia permanece por lo siglos. Aleluya, aleluya. V. Cristo, nuestra pascua, ha sido inmolado.

Secuencia

1. Victimae paschali laudes immolent Christiani. 2. Agnus redemit oves: Christus innocens Patri reconciliavit peccatores.3. Mors et vita duello conflixere mirando: dux vitae mortuus regnat vivus.4. Dic nobis, maria, quid vidisti in via?5. Sepulcrum Christi viventis: et gloriam vidi resurgentis.6. Angelicos testes, sudarium, et vestes.7. Surrexit Christus spes mea: Praecedet vos in Galilaeam.8. Scimus Christum surrexisse a moruis vere: tu nobis, victor Rex, miserere.Amen. Alleluia.1. Ofrezcan, los cristianos, sacrificios de alabanza a Jesucristo, que es la Víctima de la Pascua.
2. El Cordero ha redimido a las ovejas: Jesucristo, inocente, ha reconciliado a los pecadores con su Padre.
3. Han combatido la muerte y la vida ; el autor de ésta, después de muerto, reina vivo.
4. Dinos tú, oh María, ¿qué has visto en el camino ?
5. Yo he visto el sepulcro de Jesucristo vivo, y la gloria del que ha resucitado.
6. He visto los Ángeles, que han sido testigos, y he visto el sudario y la sábana en que fue envuelto.
7. Cristo, mi esperanza, ha resucitado, e irá delante de vosotros a Galilea.
8. Sabemos que Cristo ha resucitado verdaderamente de entre los muertos: oh Tú, Rey, vencedor de la muerte, apiádate de nosotros.

Evangelio

USequéntia sancti Evangélii secúndum Marcum. 16, 1-7 In illo témpore: Maria Magdalene, et Maria Jacobi, et Salome emerunt aromata, ut venientes ungerent Jesum. Et valde mane una sabbatorum, veniunt ad monumentum, orto jam sole. Et dicebat ad invicem: Quis revolvet nobis lapidem ab ostio monumenti? Et respicientes viderunt revolutum lapidem. Erat quippe magnus valde. Et introeuntes in monumentum viderunt juvenem sedentem in dextris, coopertum stola candida, et obstupuerunt. Qui dicit illis: Nolite expavescere: Jesum quaeritis Nazarenum, crucifixum: surrexit, non est hic, ecce locus ubi posuerunt eum. Sed ite, dicite discipulis ejus, et Petro, quia praecedit vos in Galilaeam: ibi eum videbitis, sicut dixit vobisCredo.Continuación del Santo Evangelio según San Marcos (16, 1-7) – En aquel tiempo, María Magdalena y María,  madre de Santiago, y Salomé, compraron aromas para venir y embalsamar a Jesús. y muy de mañana, el primer día después del sábado, llegaron al sepulcro, salido ya el sol. Decían entre sí: «¿Quién nos ro dará la piedra de la entrada del sepulcro?» y dirigiendo a ella sus miradas, vieron rodada la piedra, que era muy grande. y entrando en el sepulcro, vieron un joven sentado a la diestra vestido de blanco, y se asustaron. Mas él les dijo: «No temáis. Buscáis a Jesús Nazareno, que fue crucificado. Pues ,bien, resucitó y aquí no está. Ved el lugar en donde le pusieron. y ahora, id, y decid a sus discípulos y a Pedro, que va delante de vosotros a Galilea; allí le veréis, como El os dijo.» Credo.
Ps. 75, 9-10 – Terra tremuit et quievit, dum resurgeret in judicio Deus, alleluia.Ofertorio – La tierra tembló y tornó al reposo, al levantarse Dios a juicio. Aleluya.

Oración-Secreta

Suscipe, quaesumus, Domine, preces populi tui cum oblationibus hostiarum: ut paschalibus initiata mysteriis, ad aeternitatis nobis medelam, te operante, proficiant. Per DominumRecibe, Señor, las oraciones de tu pueblo, juntamente con la oblación de estas ofrendas; para que, santificadas con los Misterios Pascuales, por un efecto de tu gracia, nos sirvan de remedio para la vida eterna. Por Nuestro Señor, etc.

Prefacio propio de Pascua

Vere dignum et justum est, aequum et salutare: Te quidem, Domine, omni tempore, sed in hac potissimum die (in hoc potissimum) gloriosius praedicare, cum Pascha nostrum immolatus es Christus. Ipse enim verus es Agnus, qui abstulit peccata mundi. Qui mortem nostram moriendo destruxit, et vitam resurgendo reparavit. Et ideo cum Angelis et Archangelis, cum Thronis et Dominationibus, cumque omni militia caelestis exercitus, hymnum gloriae tuae canimus, sine fine dicentes: Sanctus, Sanctus, Sanctus, etc.Verdaderamente es digno y justo, de bido y saludable, que en todo tiempo, Señor, te alabemos; pero princi palmente con mayor magnificencia en éste, en que Jesucristo inmolado es, nuestra Pascua. Porque El es el verdadero Cor dero que quita los pecados del mundo. El cual muriendo, destruyó nuestra muer te, y resucitando, reparó nuestra vida. Por esto, con los Ángeles y Arcángeles, con los Tronos y Dominaciones, y con toda la milicia del ejército celestial, can tamos un himno a tu gloria, diciendo sin cesar: Santo, Santo, Santo, etc.
COMMUNIO Pascha nostrum immolatus est Christus, alleluia: itaque epulemur in azymis sinceratis, et veritatis, alleluia, alleluia alleluiaComunión. – Cristo, nuestra Pascua, ha sido inmolado, aleuya; por tanto, regalémonos con los ázimos de sinceridad y de verdad. Aleluya, aleluya, aleluya.

Oración-Postcomunión

POSTCOMMUNIO – Spiritum nobis, Domine, tuae caritatis infunde: ut, quos sacramentis Paschalibus satiasti, tua facias pietate concorde. Per Dominum … in unitate ejusdem Spiritus Sancti.< Señor   oh Haz,>   Infúndenos, Señor, el espíritu de tu amor; y haz que vivan unidos de corazón tus fieles, a quienes has alimentado con los Sacramentos de la Pascua. Por Nuestro Señor,


Hasta el Sábado in Albis inclusive se añaden al Ite Missa est dos aleluyas.

Tomado de:

https://tridentina-misa.blogspot.com/

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Juan envió dos discípulos a Cristo

SEGUNDO DOMINGO 
DE ADVIENTO 


ESTACIÓN EN SANTA CRUZ DE JERUSALÉN


Semidoble de 2ª clase – Ornamentos morados

   Estamos ya en pleno adviento, o por mejor decir, en franca  expectativa de la venida del Salvador del mundo. La Iglesia quiere hoy elevarnos, para que alcancemos a ver al que avanza hacia nosotros con dulce y suave majestad. La ausencia de pecado y un deseo cada vez más ardiente de llegar a Belén, acompañando a José y a María que viajan escoltados de ángeles hacia Jerusalén, será nuestra mejor disposición para este domingo y para la semana que con él empezamos.
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Ved la higuera y todos los árboles: cuando producen ya de sí el fruto, sabéis que está cerca el verano.

PRIMER DOMINGO 
DE ADVIENTO 


ESTACIÓN EN SANTA MARÍA LA MAYOR 


Doble de 1ª clase – Ornamentos morados

   ¡Cosa extraña! En este primer día y domingo del Año eclesiástico y primera evocación, podría decirse de la Creación, la Iglesia nos pone en contacto con el último día del mundo y de las cosas. Antes de llevarnos al pesebre de Belén, nos lleva al tribunal del Juicio final, para encarecernos de antemano, con el pensamiento de la cuenta, la correspondencia de la gracia soberana de la Redención, que ese Niño Divino, cuya silueta se dibuja ya en lontananza, viene a realizar. Es una fuerte sacudida que la Iglesia da a nuestra conciencia de cristianos, para despertarnos, o del letargo del pecado, si desgraciadamente estuviésemos sumidos en él, o de la modorra de la indiferencia y de la tibieza espiritual. Es decirnos: Si no estás limpio para presentarte ante el Divino Juez, tampoco lo estás para salir al encuentro de tu Salvador, que es tu mismo y único Dios y Señor; «despójate, por tanto, de las obras de las tinieblas y revístete de las armas de la Luz».
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CUARTO DOMINGO DESPUÉS DE PASCUA

Si no me voy, no vendrá a vosotros el Cosolador; pero si me voy, os le enviaré.

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TERCER DOMINGO DESPUÉS DE PASCUA

(Doble – Ornamentos blancos )

Dentro de poco no me veréis

Han pasado tres semanas de alegría. Ahora la Resurrección marcha rápida hacia la definitiva exaltación del Cristo, hacia la Ascensión… Hoy empezamos a pensar ya en la separación, y nuestra alegría se empaña con un halo de suave melancolía.

Comenzamos levantando al Cielo gritos de Júbilo: «Cantad con júbilo a Dios, toda la tierra, entonad salmos a su Nombre«. Pero San Pedro nos recuerda luego que somos extranjeros y peregrinos que todavía no hemos llegado a la Patria conquistada por la sangre de Cristo (Epístola), y que, por tanto, debemos trabajar, caminar y vivir con espíritu de los que se han revestido de Cristo.

Reconociendo nuestra debilidad, pedimos a Dios que nos conceda, a todos los que llevamos el nombre de cristianos, la gracia de rechazar cuanto se oponga a este nombre y de seguir cuanto con él conviene (Oración). El primer peregrino es el mismo Cristo, que nos habla ya en el Evangelio de su próxima partida.

Pronto va a privarnos de su presencia para poder enviarnos el Espíritu Santo, en el cual encontrarán los Apóstoles, y todos los nacidos y resucitados en Cristo, el valor necesario para llevar dignamente el nombre cristiano.

IntroitoPs. 55, 1-2

INTROITUS – Jubilate Deo, omnis terra, alleluia: psalmum dicite nomini ejus, alleluia: date gloriam laudi ejus, alleluia, alleluia, alleluia. – Ps. Ibid. 3. Cicite Deo, quam terribilia sunt opera tua, Domine: in multitudine virtutis tuae mentientur tibi inimici tui. Gloria.Introito – Cantad con júbilo a Dios, toda la tierra, entonad salmos a su Nombre, aleluya. Glorificadle y alabadle, aleluya, aleluya, aleluya.- Decid a Dios: ¡cuán estupendas son tus obras, oh Señor! Tan grande es tu poder, que serás glorificado por tus mismos enemigos. Gloria al Padre,

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S. Joseph Opificis ~ I. classis
Commemoratio: Dominica II Post Pascha

Sancta Missa

San José

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DOMINGO IN ALBIS 
Y OCTAVA DE PASCUA

Acerca tu mano y métela en mi costado, y no seas incrédulo, sino fiel.

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SEXTO DOMINGO DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

( Doble – Ornamentos verdes )

Y los dio a sus discípulos para que los distribuyesen entre las gentes

Un pensamiento predomina en la liturgia de este día: Hay que matar en nosotros el pecado con un arrepentimiento sincero, pidiendo a Dios la gracia de nunca jamás recaer en él. El Bautismo nos hizo morir al pecado, la Penitencia nos restituye de nuevo gracia divina, siendo una segunda tabla después del naufragio de la inocencia, y la Eucaristíia nos presta fortaleza contra las recaídas.

A ello nos convida hoy el Breviario, el cual trae en forma de apólogo la lastimosa calda de David, quien, a pesar de ser tan virtuoso, todavía dejó entrar en su corazón la sierpe del pecado.

Apasionado por la mujer de Urías, la hermosa Betsabé, puso a su legítimo marido a la vanguardia de su ejército en una batalla contra los Amonitas, y Urías sucumbió en la refriega conforme intento y deseos del Rey. Sigue leyendo

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DOMINGO 5º DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

(Doble – Ornamentos verdes )

Ve a reconciliarte con tu hermano.

La liturgia de este Domingo nos inculca sobre todo el perdón de las injurias, con la historia de David que sigue leyéndose en el Breviario, y un paso de las Epístolas del Apóstol S. Pedro, cuya fiesta cae en torno de este mismo Domingo.

Vencedor David del gigante Goliat fue vitoreado con entusiasmo por todo Israel, y por doquier se oía este grito: «Saúl ha muerto a mil, y David a diez mil! I (Filisteos.)

Con esto entró Saúl en celos, y la envidia carcomía su corazón, porque pensaba que iba a suplantarle en el trono de Israel. Y fue tal la melancolía y la saña que se apoderó de Saúl, que llegó a lanzar dos veces una saeta contra el cariñoso David, que le tañía el arpa por ver de calmarle y darle contento. Pero el dardo no le tocó, ni tampoco le hirieron en la guerra adonde le destinara el rey para exponerlo al peligro.

El genio malo de Saúl subió entonces de punto, y exasperado, entró cierto día en una caverna, tramando emboscada contra David. Éste, que se hallaba dentro de ella, pudo entonces matar a su injusto perseguidor. Dijéronle sus compañeros: Es el rey; el Señor te le entrega; éste es el momento de matarle con tu lanza. Pero David respondió: Jamás pondré mi mano en el que ha recibido la unción sagrada; y se contentó con cortar parte del fleco del manto de Saúl, mostrándoselo después desde lejos. Saúl al ver rasgo tan generoso, lloró, diciendo: ¡Hijo mío David, eres tú mejor que yo! Muerto Saúl en sangrienta refriega contra el Filisteo, no se alegró de ello David, antes mandó matar al infeliz Amalecita que, a ruegos del mismo rey, se había atrevido a acabar con su vida, y hasta cantó con amargas endechas su muerte, diciendo: ‘¡Montes de Gelboé! que ni rocío ni lluvia caigan más sobre vosotros… porque en vosotros cayeron los héroes de Israel: Saúl y Jonatás, amables en su vida, ni en la muerte se han separado’.

San Gregorio explica alegóricamente la maldición de David sobre el monte de Gelboé, y hasta llega a ver en Saúl, en el «Ungido del Señor», una figura de Cristo, el verdadero Rey, el verdadero Ungido y Mediador entre Dios y los hombres (II Noct.). Pero lo que más nos importa es recoger esas grandes lecciones de caridad, tanto más de admirar cuanto que se nos dan antes del Evangelio, y sin haber tenido David, como los tenemos nosotros, ejemplos tan elocuentes del perdón generoso de las injurias, como no fuera el ejemplo del Patriarca José. Verdaderamente David podía decir en los Salmos: «He devuelto bien por mal., y en esto era figura viva de Cristo nuestro Señor, el cual disculpaba y oraba por sus mismos sayones que le clavaban al madero. También la Epístola y el Evangelio(1) nos hablan del perdón de las injurias: «Vivid unidos de corazón en la oración, no devolviendo mal por mal, ni agravio por agravio. (Epist.) Y es que, además, no acepta Dios ningún sacrificio mientras haya entre nosotros alguna rencilla contra el prójimo. Tanto vale la caridad, ese mandato único que Cristo vino a traer tundo y que los compendia perfectamente a todos. Así resultó David, ungido después rey de Israel por los ancianos del pueblo en Hebrón, tomó por asalto la ciudadela de Sión, que desde entonces fue su ciudad y en ella colocó el Arca de la Alianza (Com.), recompensa debida a su caridad.

El  modo mejor de llegar a una caridad tan heroica como la de David, a esa fusión de corazones que tanto nos inculcan el Evangelio y la Epístola, será amar a Dios, y no desear sino los bienes eternos (Or.), y el morar en aquellos celestiales palacios, en que sólo se entra mediante la práctica ininterrumpida de esta hermosísima virtud.

El párroco celebra hoy la misa por sus feligreses.

Introito. Ps 26.

INTROITUS Exaudi Domine, vocem meam, qua clamavi ad te: adjutor meus esto, ne derelinquas me, neque despicias me, Deus salutaris meus. Ps. Dominus illuminatio mea, et salus mea: quem timebo? V. Gloria Patri… Introito – Escucha, Señor, mi voz, con que te he invocado; Señor; sé mi ayudador; no me abandones, ni me desprecies, Dios mío, y Salvador mío. – Ps. El Señor es mi luz y mi salvación; ¿a quién temeré? Gloria al Padre, etc. V. Gloria al Padre.

Oración-Colecta

ORATIODeus, qui diligentibus te bona invisibilia praeparasti: infunde cordibus nostris tui amoris affectum: ut te in omnibus, et super omnia diligentes, promissiones tuas, quae omne desiderium superant, consequamur. Per Dominum.
R. Amen
Oh Dios, que tienes bien preparados bienes invisibles a los que te aman, infunde en nuestros corazones el afecto de tu amor para que, amándote en todo y sobre todo consigamos un día esas tus promesas, que exceden a todo deseo. Por Nuestro Señor Jesucristo, etc.R. Amen.

Conmemoración

Epístola

El buen cristiano debe estar dispuesto a devolver bien por mal, y a perdonar y aun a bendecir al enemigo, por amor a Jesucristo; eso le reportara en la vida una gran paz y alegría y le preparara para los mayores heroísmos.

EPISTOLALectio Epistolae beati Petri Apostoli (I, 3, 8-15,) Carisimi: Omnes unianimes in oratione estote, conpatientes fraternitatis amatores, misericordes, modesti, humiles: non reddentes malum pro malo, nec maledictum pro maledicto: sed e contrario benedicentes: quia in hoc vocati estis ut benedictionem hereditate possideatis. Qui enim vult vitam diligere et dies videre bonos coerceat linguam suam a malo et labia eius ne loquantur dolum. Declinet autem a malo, et faciat bonum inquirat pacem et sequatur eam. Quia oculi Domini super iustos et aures eius in preces eorum vultus autem Domini super facientes mala. Et quis est qui vobis noceat si boni aemulatores fueritis? Sed et si quid patimini propter iustitiam beati. Timorem autem eorum ne timueritis, et non conturbemini. Dominum autem Christum sanctificate in cordibus .
Lección de la Epístola del Apóstol S. Pedro: (3, 8-15) Carísimos: Perseverad todos unánimes en la oración; sed compasivos, amantes de todos los hermanos, misericordioso, modestos humildes; no volviendo mal por mal, ni maldición por maldición; sino por el contrario, bendecid a los que os ofenden; porque a esto sois llamados, a fin d que poseáis en herencia la bendición celestial. Así pues, «El que de veras amar la vida, y quiere vivir días dichosos, refrene su lengua del mal, y sus labios no se desplieguen en favor de la falsedad. Huya del mal, y obre el bien; busque la paz, y sígala. Porque Dios tiene puestos los ojos sobre los justos, y está pronto a oír sus súplicas: pero mira con enojo a los que obran mal. ¿ y quién habrá que os pueda hacer daño, si os empleáis en hacer el bien? Pero si sucede que padecéis algo por amor a la justicia, sois bienaventurados. No temáis nada de cuanto os puedan hacer vuestros enemigos, ni perdáis la paz. Mas, bendecid a Nuestro Señor Jesucristo en Vuestros corazones.
Gradual – Oh Dios, Protector nuestro, míranos y pon los ojos en estos tus siervos. Oh Señor, Dios de los ejércitos, escucha las oraciones de tus siervos.
GRADUALE (Ps. 27 ) Protector noster, aspice, Deus: et respice super servos tuos. V. Domine Deus virtutum, exaudi preces servorum tuorum.Alleluia, alleluia. Domine, in virtute tua laetabitur rex, et super salutare tuum exsultabit vehementer. Alleluja. Gradual – Vuélvete a mirarnos, oh Dios, Protector nuestro, y pon los ojos en estos tus siervos.
Aleluya, aleluya – V.  Oh Señor, en tu poder hallará el rey su alegría, y saltará de gozo por la salvación que le enviarás. Aleluya.

Evangelio

La caridad fraterna es tan de la esencia del cristianismo, que sin ella nada es agradable a Dios, ni siquiera los más preciosos dones, ni aun la más fervorosa oración.

USequéntia sancti Evangélii secúndum Mathaeum ( 5, 20-24) In illo témpore: Dixit Jesus discipulis suis: Nisi abundaverit iustitia vestra plus quam scribarum et pharisaeorum non intrabitis in regnum caelorum. Audistis, quia dictum est antiquis: Non occides: qui autem occiderit reus erit iudicio. Ego autem dico vobis: quia omnis qui irascitur fratri suo reus erit iudicio. Qui autem dixerit fratri suo, raca reus erit concilio. Qui autem dixerit fatue reus erit gehennae ignis. Si ergo offeres munus tuum ad altare et ibi recordatus fueris quia frater tuus habet aliquid adversum te: relinque ibi munus tuum ante altare et vade prius reconciliare fratri tuo et tunc veniens offers munus tuum.Credo. U Continuación del Santo Evangelio según San Mateo – En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Si vuestra justicia no es más cumplida que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos. Habéis oído que se dijo a vuestros mayores: ‘No matarás;’ Y quien matare, será condenado en juicio(2). Yo os digo aún más: quienquiera que tome ojeriza con su hermano, merecerá que el juez le condene. Y el que le llamare ‘raca’(3), merecerá que le condene la asamblea. Mas, quien le llamare ‘fatuo’, reo
será del fuego del infierno. Por tanto, si al tiempo de presentar tu ofrenda en el altar, allí te acuerdas que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí mismo tu ofrenda ante el altar, y ve primero a reconciliarte con tu hermano, y después volverás a presentar tu ofrenda»
(4). Credo.
OFFERTORIUM Benedicam Dominum, qui tribuit mihi intellectum: providebam Deum in conspectus meo semper: quooniam a dextris est mihi, ne commovear..  OfertorioAlabaré al Señor, que me dio a comprender su santísima voluntad; yo contemplo al Señor siempre delante de mi, porque está a mi diestra, para que no me bambolee

Oración-Secreta

Propitiare, domine, suplicationibus nostris: et has oblations famulorum famularumque tuarum benignus assume: ut, quod singuli obtulerunt ad honorem nominis tui, cunctis proficiat ad salutem. Per Dominum. Atiende propicio a nuestros ruegos, Y recibe benigno estas ofrendas de tus siervos y siervas, para que lo que cada cual ha ofrecido en honor de tu Nombre, lo aproveche para su salvación. Por Nuestro Señor, etc.

Conmemoración

Prefacio de la Santísima Trinidad

Vere dignum et justum ets aequum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias agere: Domine sancte, Pater omnipotens, aeterne Deus. Qui cumm unigenito  Filio tuo, et Spiritu Sancto, unus es Deus, unus es Dominus: non in unius singularitate personae, sed in unius Trinitate substantiae. Quod enim de tua gloria, revelante te, credimus, hoc de Filio tuo, hoc de Spiritu Sancto, sine differentia discretionis sentimus. Ut in confessione verae, sempiternaeque Deitatis, et in personis Proprietas, et in essentia unitas, et in majestate adoretur aequalitas. Quam laudat Angeli atque Arcangeli, Cherubim quoque ac Sraphim: qui non cessant clamare quotidie, una voce dicentes: Sanctus, Sanctus, Sanctus… Verdaderamente es digno y justo, equitativo y saludable, que te demos gracias en todo tiempo y lugar oh Señor Santo, Padre todopoderoso y eterno Dios! Quien, con tu Hijo unigénito y el Espíritu Santo, eres un solo Dios, eres un solo Señor: no en la unidad de una sola persona, sino en la Trinidad de una sola sustancia. Porque cuanto creemos, por habérnoslo Tu revelado, acerca de tu gloria, creémoslo igualmente de tu Hijo, y del Espíritu Santo, sin haber diferencia ni separación. De modo que, al reconocer una sola verdadera y eterna Divinidad, sea también adorada la propiedad en las personas, la unidad en la esencia y la igualdad en la majestad. A la cual alaban los Ángeles y los Arcángeles, los Querubines y los Serafines, que no cesan de cantar diariamente, diciendo a coro: Santo, Santo, Santo, etc.
COMMUNIO Unam petii a Domino, hanc requiram; ut inhabitem in domo Domini omnibus diebus vitae meae.
Comunión.Una sola Cosa he pedido al Señor, y con todo empeño la procuraré: que habite yo en la casa del Señor todos los días de mi vida(5).

Oración-Postcomunión

Quos caelesti, Domine, dono satiasti: praesta,quaesumus; ut a nostris mundemur occultis, et ab hostium liberemur insidiis. Per Dominum < Señor   oh Haz,   > Concede, Señor, a los que acabas de alimentar con el Don Celestial, que seamos limpios de nuestras culpas ocultas, Y libres las asechanzas del enemigo. Por Nuestro Señor Jesucristo.

Conmemoración

  • (1) Queriendo inculcarnos esto la liturgia, se ha permitido añadir las palabras in oratione al texto de San Pedro. Así se ve más facilmente la íntima conexión de la Epístola con el texto Evangélico.

  • (2) Los escribas y fariseos se contentaban con observar la letra de la ley, no el espíritu; los cristianos, en cambio, debemos atender ante todo a su espíritu. Ellos se contentaban con no matar corporalmente; nosotros, debemos, además, no molestar ni hacer daño alguno a los demás.
  • (3)“Raca” significa mentecato, imbecil, cabeza vacía.
  • (4) Dios no acepta gustoso las ofrendas, por ricas y santas que sean, si quien las presenta está lleno de saña y de rencor contra el prójimo, o sabe que tiene a alguno ofendido o justamente resentido.
  • (5) Para poder habitar eternamente en el Cielo, que es la verdadera morada de Dios, es menester vivir siempre en el seno de la verdadera Iglesia, sin separarse de ella ni por herejía, ni por el cisma ni por el incumplimiento de los deberes religiosos. Por eso, la perseverancia en la fe y en el bien obrar, dentro de la Santa Iglesia Católica, debe ser el blanco de nuestras continuas y ardientes plegarias.

Tomado de:

http://misa_tridentina.t35.com/

Santa Misa Dominical

OCTAVO DOMINGO DESPUÉS DE PENTECOSTÉS

Rinde cuentas de tu administración

(Doble – Ornamentos verdes)

Recibió la Iglesia en las solemnidades de Pentecostés las efusiones del Espíritu Santo, y la liturgia de hoy nos demuestra los benéficos resultados de las mismas. Uno de ellos, y no el menor, es la gracia de la divina adopción, en virtud de la cual podemos llamar Padre a nuestro Dios, con derecho a la herencia del cielo (Ep.).
   Mas si vivimos por Dios, preciso es que vivamos también para Dios (Or.) y que en todo nos dejemos guiar por el Espíritu de Dios (Ep.) y así pueda acogernos algún día en sus eternos tabernáculos (Ev.). He aquí la verdadera sabiduría, que pide la Iglesia en la oración y que alaba el Evangelio, porque ella sabe prevenir con prudencia y sagacidad nuestro recibimiento en los «eternos tabernáculos». Al evocar la liturgia en estos domingos la figura de Salomón y de su magnífico Templo, podemos dirigir la mirada a ese otro templo que somos nosotros mismos, dedicado a Dios por el bautismo y convertido tal vez por nosotros en guarida de ladrones y de mil siniestras alimañas de pecados, que lo ensucian y profanan. Pues si así fuere por desgracia nuestra, habría que limpiarlo se con la escoba de Lázaro, con una condigna penitencia.
 Además, el Templo salomónico es figura del grandioso Templo del cielo, en donde Dios mora con sus Santos y en que los regala con sus delicias sin fin y sin medida. En ese mismo templo entraremos también nosotros si es que vivimos según el espíritu, y matamos las obras de la carne; entonces, y sólo entonces seremos verdaderos hijos de Dios, herederos suyos y coherederos de Cristo; el cielo será nuestra rica herencia (Ep.). Para ingresar en los eternos tabernáculos, conviénenos también allegar riquezas y méritos, de ésos que el ladrón no roba y la   polilla no carcome, hacemos amigos, tener como amigos a los Santos moradores de aquel templo; imitando así a aquel mayordomo previsor, a quien alaba Jesús en el Evangelio, no tanto por sus malas artes y su deslealtad para con el amo, cuanto por su intuición clara del futuro. Porque sucede, por desgracia, que los hijos de la luz somos menos despiertos que los de las tinieblas, y eso que nuestros negocios son de harto mayor cuantía que los suyos, yendo en ello nada menos que nuestro bienestar eterno.
   Uno de los medios más aptos para conseguir que Dios nos reciba en sus eternas moradas es dar limosna al que la hubiere menester, limosna espiritual, como un buen consejo, una justa reprensión, un cariñoso consuelo; limosna material, como un poco de pan al hambriento, un trapo para el harapiento y desnudo. Si practicáramos esta virtud, poco o nada tendremos que temer cuando el Señor universal nos venga a pedir cuentas de la administración de nuestra alma, y de los bienes y gracias que en nosotros depositó para granjear con ellos (Ev.).
   El párroco celebra hoy la misa por sus feligreses               

IntroitoPs 47

    INTROITUS – Suscépimus, Deus misericórdiam tuam in medio templi tui: secúndum nomen tuum. Deus, ita et laus tua in fines terrae: justitia plena est déxtera tua. – Ps Magnus Dominus, et laudábilis nimis in civitáte Dei nostri, in monte sancto ejus. V. Gloria Patri…    Introito – Hemos recibido, oh Dios, tu misericordia en medio de tu templo; como tu nombre, oh Dios, así tu gloria llega hasta los confines de la tierra; tu diestra está llena de justicia. Grande es el Señor y dignísimo de alabanza, en la ciudad de nuestro Dios, en su monte santo. V. Gloria al Padre.

Oración-Colecta

   ORATIO – Largíre nobis, quaesumus Domine, semper spíritum cogitándi quae recta sunt, propitius et agéndi: ut, qui sine te esse non póssumus secúndum te vívere valeámus. Per Dóminum.

   R. Amen   

    Rogámoste, Señor, nos concedas propicio la gracia de pensar y obrar siempre con rectitud; y pues sin Ti no podemos subsistir, llevemos una vida conforme a tu voluntad.  Por Nuestro Señor Jesucristo, etc.

   R. Amen.

Conmemoración

Epístola

   Para vivir con Cristo y participar de su gloria, hay que mortificar las pasiones de nuestra naturaleza corrompida y dejarnos guiar por las inspiraciones del Espíritu Santo. 

Léctio Epístolæ beáti Pauli Apóstoli ad Romános.
Fratres: Debitóres sumus non carni, ut secúndum carnem vivámus. Si enim secúndum carnem vixéritis, moriémini: si autem Spíritu facta carnis mortificavéritis, vivétis. Qui-cúmque enim spíritu Dei agúntur, ii sunt fílii Dei. Non enim accepístis spíritum servitútis íterum in timóre, sed accepístis spíritum adoptiónis filiórum, in quo clamámus: Abba (Pater). Ipse enim Spíritus testimónium reddit spíritui nostro, quod sumus fílii Dei. Si autem fílii, et herédes: herédes quidem Dei, coherédes autem Christi.
   Lección de la Epístola del Apóstol S. Pablo a los Romanos (8, 12-17)  – Hermanos: Nada debemos a la carne, para que vivamos según la carne. Por que si viviereis según la carne, moriréis; mas si con el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, entonces viviréis(1). Porque es cierto, que los que se dejan guiar por el Espíritu de Dios, ésos son hijos de Dios. Porque no habéis recibido el espíritu de servidumbre para seguir obrando con temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción de hijos, para que podamos clamar: ¡Aba! ¡Padre! Porque el mismo espíritu de Dios, está dando testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios. Y siendo hijos, somos también herederos; herederos de Dios, por cierto(2), y coherederos de Cristo. 
    GRADUALE (Ps. 33 ) – Est mihi in Deum protectórem, et in locum refúgiiet salvum me facias. V. Deus, in te sperávi: Domine, non confúndar in aetérnum.

   Alleluia, alleluia. Magnus Dominus, et laudábilis valde, in civitáte Dei nostri, in monte sanco ejus, Alleluja.

   Gradual – Sé para mí un Dios protector, y un lugar de refugio, para que me salves. V. Oh Dios, en ti tengo puesta mi esperanza; Señor, no sea yo jamás confundido.- Aleluya, aleluya – V. Grande es el Señor, y muy digno de alabanza en la ciudad de nuestro Dios, sobre su monte santo, aleluya. 

Evangelio

      Valiéndose de la parábola del mayordomo infiel, Jesús nos recomienda la práctica de la limosna y sobre todo de la limosna convertida en sufragio por los difuntos. Así empleado el dinero, lo convertimos en precio de redención, para nosotros y para el prójimo, y en granjería para la vida eterna. Con él las almas del Purgatorio se constituyen, en el Cielo, en intercesoras nuestras.

USequéntia sancti Evangélii secúndum Lucam ( 16, 11-9)

   In illo témpore: Dixit Jesus discípulis suis: parabola hanc: homo quidam erat dives qui habebat vilicum et hic diffamatus est apud illum quasi dissipasset bona ipsius. Et vocavit illum et ait illi quid hoc audio de te redde rationem vilicationis tuae iam enim non poteris vilicare. Ait autem vilicus intra se: quid faciam quia dominus meus aufert a me vilicationem? fodere non valeo mendicare erubesco. Scio quid faciam ut cum amotus fuero a vilicatione recipiant me in domos suas. Convocatis itaque singulis debitoribus domini sui dicebat primo: quantum debes domino meo? At ille dixit centum cados olei. Dixitque illi: Accipe cautionem tuam et sede cito scribe quinquaginta. Deinde alio dixit tu vero quantum debes? Qui ait centum choros tritic. Ait illi: accipe litteras tuas et scribe octoginta. Et laudavit dominus vilicum iniquitatis quia prudenter fecisset quia filii huius saeculi prudentiores filiis lucis in generatione sua sunt. Et ego vobis dico facite vobis amicos de mamona iniquitatis ut cum defeceritis recipiant vos in aeterna tabernacula 

Credo.

  Continuación del Santo Evangelio según San Lucas – En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: Había un hombre rico, que tenía un mayordomo, el cual fue acusado ante él, como dilapidador de sus bienes. Llamóle, pues, y le dijo: ¿Qué es esto que oigo decir de ti? Dame cuenta de tu administración; porque en adelante, ya no podrás ser mi mayordomo. Entonces el mayordomo se dijo: ¿Qué haré, pues que mi señor me quita la administración? Cavar no puedo; de mendigar tengo vergüenza. Ya sé lo que he de hacer, para que cuando fuere removido de la mayordomía, halle yo personas que me reciban en su casa. Llamó, pues, a cada uno de los deudores de su amo, y dijo al primero: ¿Cuánto debes a mi señor? Y éste respondió: Cien barriles de aceite. Díjole: Toma tu factura y siéntate al punto, y escribe: cincuenta. Después dijo a otro: Y tú, ¿cuánto debes? Y él respondió: Cien cargas de trigo. Díjole: toma tus facturas, y escribe ochenta(3). El señor  alabó al mayordo, infiel, por haber obrado sagazmente(4); porque Los hijos de este siglo son más sabios que los hijos de la luz. Así os digo yo a vosotros: granjeaos amigos con las riquezas de iniquidad, para que, cuando falleciereis, os reciban en las moradas eternas.

   Credo.

    OFFERTORIUM – Pópulum húmilem salvum fácies, Dómine, et óculos superbórum humillábis: quoniam quis Deus praeter te, Dómine?    Ofertorio –  Tú salvarás al pueblo humilde, y humillarás los ojos altaneros; porque ¿qué otro Dios hay fuera de ti, oh Señor?

Oración-Secreta

    Súscipe,  quaesumus, Domine, múnera, quae tibi de tua largitáte deférimus: ut haec sacrosancta mystéria, gratiae tuae operáte virtúte, et praeséntis vitae nos consversatióne sanctificent, et ad gáudia sempiterna perducant. Per Dominum.     Acepta de buen grado, los dones que de tu munificencia hemos recibido y ahora te devolvemos; para que, mediante la operación de tu gracia, nos santifiquen estos sacrosantos misterios durante la vida presente, y nos conduzcan después a los goces eternos. Por Jesucristo N. Señor. 

Conmemoración

Prefacio de la Santísima Trinidad

    Vere dignum et justum ets aequum et salutare, nos tibi semper, et ubique gratias agere: Domine sancte, Pater omnipotens, aeterne Deus. Qui cumm unigenito  Filio tuo, et Spiritu Sancto, unus es Deus, unus es Dominus: non in unius singularitate personae, sed in unius Trinitate substantiae. Quod enim de tua gloria, revelante te, credimus, hoc de Filio tuo, hoc de Spiritu Sancto, sine differentia discretionis sentimus. Ut in confessione verae, sempiternaeque Deitatis, et in personis Proprietas, et in essentia unitas, et in majestate adoretur aequalitas. Quam laudat Angeli atque Arcangeli, Cherubim quoque ac Sraphim: qui non cessant clamare quotidie, una voce dicentes:

   Sanctus, Sanctus, Sanctus…

   Verdaderamente es digno y justo, equitativo y saludable, que te demos gracias en todo tiempo y lugar oh Señor Santo, Padre todopoderoso y eterno Dios! Quien, con tu Hijo unigénito y el Espíritu Santo, eres un solo Dios, eres un solo Señor: no en la unidad de una sola persona, sino en la Trinidad de una sola sustancia. Porque cuanto creemos, por habérnoslo Tu revelado, acerca de tu gloria, creémoslo igualmente de tu Hijo, y del Espíritu Santo, sin haber diferencia ni separación. De modo que, al reconocer una sola verdadera y eterna Divinidad, sea también adorada la propiedad en las personas, la unidad en la esencia y la igualdad en la majestad. A la cual alaban los Ángeles y los Arcángeles, los Querubines y los Serafines, que no cesan de cantar diariamente, diciendo a coro: Santo, Santo, Santo, etc.
   COMMUNIO  Gustáte, et vidéte, quóniam suávis est Dominus: beátus vir, qui sperat in eo.     Comunión. – Gustad y ved cuán suave es el Señor; dichoso el varón que confía en Él.

Oración-Postcomunión

     Sit nobis, Domine, reparátio mentis et córporis caeléste mystérium: ut cujus excécuimur cultum, sentiámus effécium. Per Dominum    Sírvanos, oh Señor, este celestial Sacramento para reparación del alma y del cuerpo; a fin de que, al celebrarlo, experimentemos sus saludables efectos. Por Jesucristo N. Señor.

 Conmemoración 


  • (1)   Las obras de la carne, las sensualidades, las bajas pasiones, conducen el alma a la muerte eterna; las obras del espíritu, en cambio, la preparan para la vida del cielo.

  • (2) Somos herederos de Dios, no en el sentido humano de heredar los bienes de un difunto, pues Dios no muere, Dios es inmortal, sino en el sentido de que gozaremos del Cielo, segura, eterna e inalienablemente, viviendo y reinando con Él.

  • (3) El ardid que el mayordomo infiel inventa para ganarse amigos para el futuro, es injusto, pues es a costa de los bienes de su amo.

  • (4) Adviértase bien que lo que alaba y admira el Señor no es el fondo inmoral del proceder del mayordomo, sino su astucia, es decir, la habilidad con que obró para no quedarse de repente en la calle. En esto los mundanos prosperan más que los hombres de conciencia, por la sencilla razón de que no respetan los medios.

Tomado de:

http://misa_tridentina.t35.com