19/01/2018
El día en que el Papa Francisco ha pasado de Chile a Perú, ha comenzado en todo el mundo la semana de oración para la unidad de los cristianos que se celebra cada año, y que culmina el 25 de enero con la fiesta de la conversión de San Pablo.
Hace cincuenta años, el 25 de julio de 1967, en Estambul, el camino ecuménico vivió un acontecimiento histórico: el segundo encuentro entre Pablo VI y el patriarca ecuménico de Constantinopla, Atenágoras. En ocasión de este aniversario, Eliana Versace, historiadora de la Iglesia, ha publicado en el «Notiziario» del Instituto Pablo VI de Brescia dos documentos de interés excepcional.
Se trata de dos informes enviados por el entonces embajador de Italia en Turquía, Mario Mondello, al ministro de asuntos exteriores italiano de la época, el senador Amintore Fanfani.
El primer informe es un resumen razonado del viaje realizado por el Papa Giovanni Battista Montini a Turquía.
Mientras que el segundo, de una decena de páginas, refiere la larga conversación que tuvo el embajador con Atenágoras unos diez días antes del encuentro con Pablo VI.
Una conversación que el embajador fue el primero en encontrar «sorprendente» y «desconcertante», empezando por el personaje que tenía ante sí: «pintoresco», «vehemente y afable», «tal vez un poco patoso y tal vez un poco histriónico».
Este perfil ya nos induce a asociar la figura de Atenágoras a la del Papa Jorge Mario Bergoglio.